Ojala

Description

AFTER MY FIRST TRIP TO CUBA SINCE 1959, I WAS HEARTBROKEN AT SEEING ALL OF THE ONCE BEAUTIFUL BUILDINGS CRUMBLING FROM NEGLECT AND I WAS INSPIRED TO DO A PAINTING SHOWING THE COLLAPSING BUILDINGS CONTRASTED BY WHAT THEY SHOULD BE LIKE.  THE POPULAR CUBAN EXPRESSION OJALA (OH-HA-LA) THERE IS NOT A ONE WORD TRANSLATION BUT IT MEANS “ GOD WILLING” AND IS OFTEN SAID WITH A SARCASTIC TONE THAT IMPLIES “  BUT THAT WILL NEVER HAPPEN”.  2019 IS THE YEAR I FINISHED THIS PAINTING AND 60TH YEAR OF COMMUNISM IN CUBA.

SO I PUT IN TWO SEPARATE FICTITIOUS STREETS WITH TWO SEPARATE REALITIES. 

ON THE RIGHT IS CUBA AS IT IS, WITH INHABITED  BUILDINGS IN VARIOUS STAGES OF COLLAPSE. ELECTRICAL WIRES ON THE OUTSIDE OF BUILDINGS. POTHOLES, TRASH PILES, BROKEN SIDEWALKS, BALCONIES SUPPORTED WITH LUMBER AND LAUNDRY HUNG FROM THE BALCONIES. THERE IS A BICITAXI, A YELLOW COCO TAXI (A COCO TAXI HAS A FIBERGLASS BODY WITH A MOTOR SCOOTER ENGINE), A BROKEN DOWN CAR AND OF COURSE THE CLASSIC OLD CHEVY. KIDS PLAY ON THE STREETS AND THERE ARE NUMEROUS PEOPLE IN UNIFORMS (POLICE, MILITARY, NURSE , SCHOOLGIRL ). AN AIRPLANE LEAVING SYMBOLIZES THE WISHES OF MANY ISLANDERS AND THE 3 BUZZARDS ARE NAMED RAUL, FIDEL AND CANEL. IN THE BACKGROUND THE GULF OF MEXICO BREAKS OVER THE MALECON SEAWALL AND THE CAPITOLIO (A COPY OF THE US CAPITAL BUILDING) LOOMS. THAT IS ME SELLING FRUIT WHICH IS WHAT I TOLD MY MOTHER I WOULD PROBABLY BE DOING IF SHE HAD NOT GOTTEN ME OUT.

ON THE LEFT MY DACHSHUND WATCHES MY LATE MODEL TRUCK CONTRASTING WITH THE 54 CHEVY OPPOSITE WHILE THE DESTRUCTION OF DISREPAIR FADES.  IN THE FOREGROUND ARE MY GROWN KIDS WITH MY GRANDKIDS WHILE YOUNGER VERSIONS OF MY PARENTS STROLL IN FRONT OF THE 1957 CADILLAC CONVERTIBLE WE LEFT BEHIND. THE TREES ARE IN PLANTERS INSTEAD OF GROWING WILD FROM ROOFTOPS.  IN THE BACKGROUND IS THE “HOTEL NACIONAL”( ANOTHER OF CUBAS MOST FAMOUS BUILDINGS. WHILE A WAVE BREAKS IN FRONT OF A TRANSTUR BUS.  THE AIRPLANE DEPICTS TOURISTS AND EXILES ARRIVING.  “ OJALA”

La historia de ojalá:

Después de mi primer viaje a Cuba desde 1959, sentí gran desilusión al ver los otrora bellos edificios desmoronándose. Esto me inspiró a hacer un cuadro que mostrara el destrozo de los mismos en contraste a como deberían ser. 2019, es el año en el que terminé el cuadro y el 60 aniversario del comunismo cubano.

En el cuadro puse en dos calles ficticias, dos realidades diferentes. A la derecha está Cuba como es ahora, con edificios habitados en distintas etapas de destrucción. Cables eléctricos por fuera, baches, montones de basura, aceras rotas, balcones apuntalados y ropa tendida en ellos. Hay un bici-taxi, un coco-taxi amarillo (el coco-taxi es una carrocería de fibra de vidrio con un motor de escúter), un carro roto y por supuesto el clásico Chevy viejo. También se aprecian niños jugando en la calle y varias personas en uniformes (policía, militar, enfermera, y la estudiante). El avión que se aleja simboliza los deseos de muchos cubanos y las tres tiñosas se nombran Raúl, Fidel y Canel. A lo lejos el mar Caribe arremete contra el muro del Malecón, y el Capitolio (una copia del capitolio estadounidense) asoma. El vendedor de frutas soy yo, que como le dije a mi madre, hubiera sido mi destino sino me hubiera sacado del país.

A la izquierda del cuadro, mi perro salchicha contempla mi camioneta último modelo que es todo lo contrario al destartalado Chevy del 54. En el primer plano están mis ya crecidos hijos con mis nietos,  mientras que una versión más joven de mis padres se pasean frente al Cadillac convertible del 57 que dejamos atrás al marcharnos. Las plantas están en macetas en vez de crecer silvestres de las azoteas.

A lo lejos se ve el Hotel Nacional (otra edificación famosa de Cuba). Mientras una ola irrumpe frente al autobús de TransTur y un avión se aproxima con turistas y exiliados…Ojalá!